Cuatro años después de la apertura, las cuentas del club registraron beneficios por primera vez. Puede que hayan existido esos silencios, segunda equipacion atletico de madrid 2023 pero no parece concebible que en los años del franquismo hubiera manifestaciones de disidencia política en el seno de ninguna hinchada. Como tampoco parece que a los Indar Gorri osasunistas les afecte que Antonio Lizarza, político furiosamente derechista e impulsor del requeté carlista, equipacion atletico de madrid 2023 fuera el presidente rojillo en la posguerra.
